El estornudo es un acto reflejo que todos experimentamos, pero pocos conocen su verdadero propósito y la complejidad que implica este mecanismo de defensa natural.
Desde la expulsión de irritantes hasta la activación de múltiples músculos, el estornudo cumple una función protectora que puede verse afectada si intentamos reprimirlo.
Médicos advierten que contener un estornudo puede causar daños considerables y recomiendan seguir ciertas pautas para estornudar de manera segura, especialmente en ambientes públicos.
Cuando las fosas nasales detectan irritantes como polvo, alérgenos o cambios bruscos de luz, se envía una señal al cerebro para activar una reacción en cadena en el sistema muscular.
La orden incluye la contracción de músculos del pecho, el diafragma, los músculos abdominales e incluso los párpados. Así, nuestro cuerpo se prepara para expulsar el aire, junto con las partículas irritantes, a una velocidad de hasta 70 km/h, un mecanismo potente que puede proyectar partículas hasta ocho metros.
El acto de reprimir un estornudo puede ser más peligroso de lo que parece. En diciembre pasado, la revista médica BMJ Case Reports documentó el caso de un paciente que sufrió un desgarro de 2 mm en la tráquea al intentar contener un estornudo. Aunque se recuperó con tratamiento de analgésicos, el caso ilustra el riesgo de evitar esta respuesta natural.
Expertos de la Universidad de Dundee, en Escocia, explican que al tapar boca y nariz para evitar un estornudo, se eleva la presión en las vías respiratorias hasta 20 veces más de lo normal, lo cual puede llevar a consecuencias como:
Roturas vasculares y sangrado nasal.
Hemorragias en la conjuntiva ocular o el tímpano.
Dolor en los oídos y alteraciones auditivas.
En casos extremos, incluso desgarros en la garganta o rotura de costillas.
Consejos para estornudar de forma segura:
Para evitar la propagación de virus y respetar a quienes nos rodean, los expertos sugieren seguir algunas recomendaciones simples:
En espacios privados: Si estás solo, en una habitación o en tu oficina, deja que el estornudo salga libremente.
En lugares públicos: Usa el interior de tu codo para cubrirte, evitando estornudar sobre tus manos para no propagar gérmenes.
Con cubrebocas: Si estás enfermo, es fundamental usar cubrebocas para evitar que las gotículas transmitan posibles infecciones a otros.